domingo, 28 de julio de 2013

Así es, y así será.

Un blog, el tener que llegar a estos extremos me produce nauseas, simplemente la idea de tener que escribir para expresar exactamente lo que sientes sueña un poco "heavy". Los sentimientos que tengo ahora mismo son demasiado fuertes como para callarlos bajo una coraza de simpatía y felicidad. Porque todos aparentamos ser felices, ser capaces de reír, de bromear sobre nosotros mismos, de tener la suficiente autoestima como para auto-delatarse y insultarse. Y después llega cuando los demás ven que no te duele ahí es cuando la cosa cambia y la confianza llega a un punto de incomodidad y impotencia. Las personas admiramos a la gente con confianza porque la anhelamos por la simple razón de que siempre cuelga de un hilo y creemos que a los demás no les supone esfuerzo, pero bajo ese cachas había un niño regordete de los que todos se reían en el colegio, bajo esa modelo una niña que se desarrolló demasiado pronto y sufrió la ignorancia de los chicos mayores, bajo ese humorista una necesidad incontenible de reírse de el mismo y que los demás lo consideren algo normal y yo aún estoy descubriendo que hay más allá de mi, hasta donde llegan mis pensamientos y hacia donde se van a dirigir, una vida de continuo control. 

1 comentario:

  1. Poco a poco vas descubriendo que el control no significa callar, intentar caer bien, o reprimir cada deseo.
    Amar la propia esclavitud significa permanecer fiel a sí mismo, hacer lo que realmente te gusta, disfrutar cada instante, aceptar las consecuencias de cada acción... amar quién eres.

    ResponderEliminar